La estructura, a pocos metros de la columnata de la Plaza de San Pedro, ocupa todo un edificio de cuatro plantas (casi 2.000 metros cuadrados) propiedad del Vaticano, en la zona extraterritorial. Allí se proporcionará comida caliente y refugio tanto a hombres como a mujeres. El proyecto parte en el marco de la inminente III Jornada Mundial de los pobres y estará gestionado por la Limosnería Apostólica y la comunidad de Sant’Egidio.
La estructura, a pocos metros de la columnata de la Plaza de San Pedro, ocupa todo un edificio de cuatro plantas (casi 2.000 metros cuadrados) propiedad del Vaticano, en la zona extraterritorial. Tras ser desocupado por una congregación religiosa femenina, que lo utilizó hasta hace unos meses, el Papa Francisco quiso utilizarlo para esta obra de caridad a favor de las personas necesitadas. Por lo tanto, la Administración del Patrimonio de la Santa Sede lo ha confiado como préstamo a la Limosnería Apostólica y será gestionado por la Comunidad de Sant’ Egidio.